Bárcenas mantiene su escaño en el Senado y la dirección del PP, en un comunicado oficial, considera que la renuncia es “transitoria hasta que quede acreditada su inocencia ante las instancias judiciales” que investigan la presunta implicación del tesorero y del diputado Jesús Merino en el caso Gürtel.
Junto al comunicado de Bárcenas en el que anunció su dimisión, el PP difundió otro en el que manifiesta su confianza en el tesorero, destaca el reconocimiento a su trabajo tras 28 años de servicio al partido y recalca que no procederá a su sustitución porque cree que es inocente, lo que quedará “acreditado”.
Pero la dimisión de Bárcenas deja detrás una etapa de divisiones internas: los que le respaldaron siempre –Ana Mato, Javier Arenas y Mariano Rajoy– y los que querían que se fuera –María Dolores de Cospedal, Esteban González Pons y las bases del partido–.
Aunque nadie esperaba que ayer dimitiera, ya que el Tribunal Supremo no ha pedido aún el suplicatorio al Senado, Bárcenas tomó la decisión ayer, el mismo día en que el Comité Ejecutivo del PP, en el que estuvo presente el tesorero, daba por cerrado el presente curso político.
La Ejecutiva del PP abordó durante la reunión muchos asuntos, desde la nueva financiación autonómica a la ruptura del diálogo social, y el caso Gürtel no ha faltado: Rajoy la ha tildado de “campaña brutal” orquestada por el Gobierno contra su partido.
Y de paso, como hizo en varias ocasiones antes, la última en Málaga, hace dos semanas, el líder del PP dejó claro que las decisiones sobre los cargos presuntamente relacionados con la trama de Francisco Correa las adopta él: “Sé lo que estoy haciendo”, afirmó.
También dijo que esas decisiones obedecen a las “convicciones” del partido y al “sentido común”, pues en el PP la presunción de inocencia está reafirmada hasta el final.
Pero, como indicaron fuentes presenciales en el cónclave, el gesto de Bárcenas siempre fue “muy serio”.
Y así, terminado el Comité, el senador por Cantabria pidió a Rajoy que se reunieran: entonces le anunció que renunciaba temporalmente al cargo.
Si Rajoy en público y en privado dejó claro que apoya a Bárcenas, otros dirigentes, sólo en privado, llegaron a declarar que estaban “hartos” de la situación del hasta ayer tesorero y de las consecuencias que ésta generaba en el PP. De hecho, algunos maniobraron para que Bárcenas se fuera con el fin de evitar más daño al partido.
La secretaria general, María Dolores de Cospedal, se reunió con él a primeros de mes y le transmitió el malestar de muchos sectores de la formación.
Sí fueron expresivos sobre la conveniencia de que Bárcenas se fuera el diputado Vicente Martínez-Pujalte, quien le invitó a reflexionar sobre su continuidad –ayer estimó que su decisión es buena para el partido–, y el presidente del PP vasco, Antonio Basagoiti, quien dijo que él habría dimitido.
PSOE: "A BÁRCENAS LE HA DIMITIDO EL SUPREMO"
El responsable de Ciudades y Política Municipal del PSOE, Antonio Hernando, señaló ayer que al hasta ahora tesorero del PP, Luis Bárcenas “le ha dimitido” el Tribunal Supremo porque “el señor Rajoy ha sido incapaz de echarle”.
Hernando, en una declaración a los periodistas en la sede del PSOE, se referió a la dimisión transitoria anunciada por el senador del PP de su cargo de tesorero de este partido y dijo que Bárcenas se ha ido “como y cuando ha querido”.
El dirigente socialista se preguntó ante esta dimisión que si no hay ninguna implicación en el caso Gürtel, por qué se ha ido; “si se va, es que hay algo, y, entonces – añadió–, la pregunta es por qué ha tardado tanto en irse”.
Tras criticar que Mariano Rajoy siga respaldándole, Hernando dijo que el PSOE confía en la Justicia y en que el Alto Tribunal “averigüe qué hay detrás de este enorme caso de corrupción que afecta al corazón del PP”.
