Erdogan rechazó ayer en un primer momento reunirse con Pence y Pompeo, indicando que solo hablaría con su homólogo, Donald Trump
El vicepresidente estadounidense, Mike Pence, y el secretario de Estado, Mike Pompeo, se reunirán este jueves en Ankara con el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, para negociar un posible alto el fuego en la ofensiva turca contra milicias kurdas en el noreste de Siria.
Erdogan rechazó ayer en un primer momento reunirse con Pence y Pompeo, indicando que solo hablaría con su homólogo, Donald Trump, pero poco después rectificó y los emplazó a una reunión el jueves.
"Él (Trump) insistía en mediar, insistía en el alto el fuego... Al final le dije: envía una delegación, negociamos y llegamos a un acuerdo primero. Luego hablaremos del alto el fuego", dijo Erdogan a la emisora turca NTV.
El mandatario dijo ayer que solo pondría fin a la ofensiva si las milicias kurdas se desarman y se retiran de la franja de 30 kilómetros de ancho y 480 de largo que Ankara aspira a tener bajo control en el noreste de Siria.
Ayer llegó parte de la delegación estadounidense, con el asesor de Seguridad Nacional, Robert O'Brien, y el enviado especial para Siria, James Jeffrey, que se reunieron con el ministro de Exteriores turco, Mevlüt Çavusoglu.
EEUU se implicó en la guerra en Siria en septiembre de 2014 para luchar contra el grupo terrorista Estado Islámico (EI) y encontró en las milicias kurdosirias laicas Unidades de Protección del Pueblo (YPG) a sus mejores aliados.
Turquía lanzó una ofensiva contra esas milicias, que considera terroristas, el pasado 9 de octubre, pocos días después de que EE.UU. anunciara el repliegue de sus soldados del territorio sirio.
Ese mismo día, Trump envió una carta al presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, en la que le pedía negociar con él un "buen trato" sobre Siria o en caso contrario le amenazó con "destruir" la economía turca.
Ajena a los encuentros diplomáticos sigue la ofensiva turca en el noreste de Siria, con fuego de artillería en las ciudades fronterizas de Ras al Ain y Tal Abiad, si bien Ankara aseguraba desde el fin de semana controlar ambos núcleos urbanos.
También se han registrado algunos combates en Manbech, donde las fuerzas leales a Bachar al Asad se han desplegado tras llegar a un acuerdo con las milicias kurdas para intentar evitar el avance turco en la región.
El presidente turco declaró ayer que no le parece "desfavorable" que las fuerzas del régimen tomen el control de la zona si supone la retirada de las YPG.
El ministerio de Defensa anunció este jueves que han matado, capturado o herido a 673 milicianos de las YPG desde que empezó la ofensiva el pasado 9 de octubre.
Por otro lado, tres civiles resultaron heridos ayer en la ciudad turca fronteriza de Cizre, por la caída de un proyectil lanzado desde el lado sirio.