El PNV y Coalición Canaria (CC) darán el martes la llave a los socialistas para salvar el primer trámite parlamentario de los Presupuestos Generales del Estado para 2010 gracias al acuerdo que el partido en el Gobierno cerró ayer con estas dos organizaciones políticas.
Las cinco enmiendas a la totalidad presentadas por seis formaciones políticas –PP, CiU, UPyD, el BNG, ERC e IU-ICV– serán de esta forma rechazadas en el pleno del Congreso del próximo martes, lo que permitirá que las cuentas del Estado sigan su tramitación.
A última hora, y poco antes de que acabase el plazo de presentación de las enmiendas a la totalidad, se cerró el acuerdo, mediante el cual los nacionalistas vascos, a cambio de no enmendar las cuentas, consiguen todas sus pretensiones, especialmente la de garantizar en tiempo y forma el blindaje del Concierto Económico.
Por su parte, CC logra con este pacto más inversiones para el archipiélago.
Los socialistas han preferido asegurarse a estos dos partidos antes que a los de la izquierda, después de unas negociaciones que no han llegado a buen puerto sobre todo por las diferencias en materia fiscal.
Por eso, el grupo formado por ERC e IU-ICV ha presentado una enmienda a la totalidad del proyecto de ley presupuestario, aunque ninguna de estas formaciones descarta apurar las negociaciones y sus portavoces esperan que el PSOE haga uso del “margen” que ha reconocido que tiene para subir los impuestos a las rentas más altas y favorecer a las más bajas manteniendo la deducción de 400 euros.
IU-ICV ha esperado hasta ayer por la mañana para suscribir la enmienda de su grupo que ya iba a presentar ERC, y se ha decidido, según el diputado Gaspar Llamazares, al comprobar que el Gobierno no ha buscado una salida a la crisis “desde la izquierda” y, al pactar con el centro-derecha, dejó aparcadas los posibles cambios fiscales.
El portavoz socialista en el Congreso, José Antonio Alonso, reconoció su intención de seguir negociando con estas formaciones y con los partidos minoritarios, y admitió que el PSOE sigue viendo margen para modificaciones impositivas, aunque menos ambiciosos que los que proponen las formaciones de izquierda.
Como ejemplo, el mantenimiento de la deducción de 400 euros, que IU-ICV quiere que se haga para todas las rentas inferiores a 18.000 euros mientras el PSOE defiende dejarla para las rentas inferiores a 11.000 e ir haciéndola progresiva hasta los 15.000, pero no más allá.
Alonso advirtió en cualquier caso de que en esta nueva fase de negociaciones espera de las formaciones de izquierda propuestas “realistas” que se puedan llevar a cabo.
El primer escollo de los Presupuestos se superará el martes gracias a dos acuerdos muy distintos que además, en palabras de Alonso, son igualmente “complejos”.
El pacto con el PNV marca un calendario para el blindaje del Concierto Económico: debe estar aprobado por la Comisión Constitucional del Congreso y remitido al Senado antes del 15 de diciembre.
Además, la Hacienda estatal habrá de pagar a la Diputación de Álava, entre lo que queda de año y el primer semestre de 2010, los más de 450 millones de euros que le debe en concepto de IVA, y los socialistas deberán informar al PNV de la evolución de las transferencias de las políticas activas de empleo.
El acuerdo con CC tiene un cariz más económico, y supone inversiones para un plan de empleo, otro de infraestructuras, compromisos ferroviarios en Tenerife y Gran Canaria o quince millones de euros para asistir a los inmigrantes menores, entre otras cuestiones.
Para el principal partido de la oposición, el PP, el acuerdo con el PSOE hace al PNV y a CC “cómplices” de la “equivocada” y “desastrosa” política económica del Gobierno.
Así lo apuntó tras, el registro de la enmienda a la totalidad de este partido, su portavoz económico, Cristóbal Montoro, para quien está “muy claro” que el PNV no busca mejorar el concierto económico vasco, sino un pretexto para dar su respaldo al PSOE con el fin de intentar “abrir una brecha” en el País Vasco y hacerse con “un hueco de poder”.