Los sindicatos mayoritarios han celebrado el acuerdo por el nuevo convenio del metal después de diez días de huelga con movilizaciones masivas y disturbios porque garantiza el incremento de los sueldos de los trabajadores parejo a la subida del coste de la vida. La coyuntura económica ha disparado el IPC, que acabará el año presumiblemente en torno o por encima del 5%. Pero “los empresarios no quieren abordar esta cuestión desde hace cuatro años al menos”, asegura Matías Agrafojo, secretario general del sindicato provincial de Servicios, Movilidad y Consumo de UGT Cádiz. “Los compañeros del metal servirán de punta de lanza para las futuras negociaciones”, agrega.
La crisis sanitaria ha frenado las mesas negociadoras y hay un buen puñado de convenios atascados. El sábado, el delegado de Empleo, Formación, Trabajo Autónomo, Transformación Económica, Industria, Conocimiento y Universidades en Cádiz, Alberto Cremades, anunció un preacuerdo en el conflicto relacionado con la negociación del XV Convenio Colectivo de APM Terminals Algeciras S. A, que afecta a 250 trabajadores.
Pero, en la provincia de Cádiz, quedan pendientes por resolver tres de empresa y dos sectoriales, según la secretaria de Mujer de CCOO Andalucía, Yolanda Carrasco, de suma importancia.
Es el caso del convenio de la Sociedad Cooperativa Claros, del Ayuntamiento de Jerez, responsable del servicio de ayuda a domicilio, con más de 200 trabajadores, con diferencias en torno a modificaciones sustanciales de las condiciones de trabajo impuestas de forma unilateral por la empresa en materia de jornada, turnos de trabajo y horarios.
Una de las firmas que opera con Acerinox en Algeciras, Carbonell Figuerras, con medio centenar de empleados afectados, ofrece resistencia para que se aplique el convenio del metal.
También en la comarca de Gibraltar, no hay avances entre la plantilla, integrada por 200 asalariados, y Sacyr Facilities, empresa de recogida de residuos, cuyo convenio está enquistado por los sueldos.
El sector de la vid no se quiere quedar atrás y ha pedido a la patronal Fedejerez el inicio de las negociaciones, frenadas en seco en enero, según informa Francisco C. Aleu.
El transporte de mercancías acude al Sercla el próximo día 9 al Sistema Extrajudicial de Resolución de Conflictos Laborales en Andalucía (Sercla) para aprobar las tablas salariales propuestas por la representación legal de los trabajadores.
Finalmente, el sector de la limpieza de la provincia de Cádiz se manifestó este viernes porque, según denunciaron los representantes sindicales, “el rechazo de la patronal a la subida salarial propuesta en los próximos años, dejan al sector por debajo del Salario Mínimo Interprofesional (SMI), teniendo en cuenta las subidas que éste está teniendo y tendrá en los próximos años”.
No es el único caso, advierte Carrasco, de actividades con nóminas por debajo de los 1.050 euros. “Llevamos un año y medio muy duro, de recortes de derechos, en general, y de pérdidas de oportunidades” como evidencia la desindustrialización de la Bahía de Cádiz con el cierre de la planta de Airbus.
“El paro alcanza el 25%, la subida de los sueldos firmados en Andalucía en el presente ejercicio es de un 1,3% de media, y hay hartazgo ante la incertidumbre económica”, advierte. De manera que, ante esta coyuntura, “la conflictividad irá en aumento el próximo año”, vaticina.
Las claves de las negociaciones serán justo las que se han puesto sobre la mesa en el caso del sector del metal, además de la ultractividad, la protección de los eventuales y la recuperación de poder adquisitivo, explica Carrasco. En este sentido, muestra su preocupación por el descuelgue del convenio de las empresas porque “el convenio sectorial ofrece muchas más garantías”. No en vano, el 65% de los convenios sectoriales en la provincia incluyen cláusulas de garantía salarial; en el de empresas, el porcentaje se reduce al 25%.
Por sectores, de acuerdo a la información del Registro y Depósito de Convenios y Acuerdos Colectivos de Trabajo (Regcon), el mayor número de convenios que incluyen las cláusulas de garantía salarial pertenecen a las actividades vinculadas a la industria de la marroquinería, la pequeña y mediana industria del metal, la hostelería (que llegó a un acuerdo el pasado mes de junio entre sindicatos y patronal), fábrica de tapones, comercio del metal, comercio general de la piel y el calzado, el comercio de muebles, los almacenistas y comercios de alimentación, viticultura, oficinas y despachos, derivados del cemento, industrias vinícolas, pompas fúnebres y las agencias consignatarias de buques.
