La Fundación +34 ha iniciado una campaña para conseguir que una granadina presa en Cali (Colombia) junto a su hijo de dos años pueda cumplir el resto de su condena en arresto domiciliario, de modo que el pequeño pueda llevar una vida fuera del penal al lado de su progenitora y en mejores condiciones de las que tienen actualmente.
La mujer de 33 años fue detenida en abril del pasado año junto al pequeño en el aeropuerto internacional Alfonso Bonilla de Cali cuando transportaba cocaína actuando como mula. El niño, Juanito, tenía entonces ocho meses y ella fue condenada a tres años de prisión, prácticamente la pena mínima, que además le ha sido rebajada por buen comportamiento, por lo que aún tiene pendiente de cumplir algo más de un año de cárcel, según ha relatado a Europa Press el director de la Fundación +34, Javier Casado.
El primer objetivo de esta organización, que presta asistencia a presos españoles que se encuentran desamparados en otros países, es conseguir el arresto domiciliario para ella en Cali, para garantizar que madre e hijo siguen juntos. De este modo, el niño podría, con la ayuda de voluntarios, ir a la guardería o al parque y hacer una vida medianamente normal mientras su progenitora cumple el resto de la condena en la vivienda.
El problema radica en que al no tener la granadina a nadie en Cali y carecer de recursos económicos, se vería abocada a recurrir a su entorno penitenciario para ofrecer un domicilio donde poder cumplir el arresto domiciliario y las barriadas que se barajarían no reunirían las condiciones de seguridad y servicios deseables para el pequeño, según relatan los promotores de la campaña, que avanza el diario 'Ideal'.
La Fundación +34 descarta en principio separar a madre e hijo. Así, busca el modo de financiar a esta madre los 300 euros al mes que costaría el alquiler de una vivienda en una zona más segura y residencial de Cali durante el tiempo que le queda de condena.
Desde la organización, que tiene convenios con otras comunidades autónomas, han iniciado gestiones con el Defensor del Pueblo Andaluz y con la Junta de Andalucía para hacerles llegar este caso y han apelado también a la movilización social para ayudar a estos dos españoles que están atravesando una situación tan complicada.
Otra vía sería pedir el traslado a España, como ocurrió en el caso de la joven de Almuñécar (Granada) Alejandra Pozo, que se encontraba en arresto domiciliario con sus hijos en Medellín y consiguió regresar en 2016. No obstante, la madre de Juanito prefiere de momento explorar la vía del arresto domiciliario.
