Un total de 40 voluntarios pertenecientes a los clubes de buceo Calahonda y Universitario de Granada ha limpiado, con el objetivo de intentar paliar la pérdida de Posidonia, una pradera situada en la playa de Cambriles, en el término municipal de Lújar, en la Costa de Granada.
Considerada el pulmón del mar, la Posidonia es una planta submarina con capacidad para limpiar el agua. De ahí su importancia y el peligro que supone su destrucción.
En una jornada de trabajo se consiguieron sacar casi 200 kilos plásticos y otros residuos generados por el ser humano que cada día caen al mar. Así lo ha asegurado a Europa Press el director de la Escuela Buceo de Calahonda, Emilio Ortiz, quien ha explicado que "es difícil cuantificar en kilos porque son residuos de muy poco peso y además se prensan". En total, lograron recuperar 30 sacos de residuos.
"El 90 por ciento de lo recogido fue plástico aunque el resto también fueron residuos generados por el ser humano", ha lamentado Ortiz, explicando que, a día de hoy, sólo quedan dos praderas en toda la costa granadina, la de Cambriles y la de la playa del Lance.
La pesca de arrastre, prohibida a esta distancia de la costa, es el principal enemigo de la Posidonia. A esto hay que sumar la "falta de civismo" de los usuarios de playas que "tiran por la borda de sus barcos de recreo las latas o los restos de comida". Además, existen plagas por la entrada de especies invasoras que también han dañado a esta planta submarina.
Ortiz asegura que el plástico que se tira al mar contamina el agua donde vive el pescado que después se consume por lo que "el ser humano se ve directamente perjudicado por esta contaminación ya que el pescado que se consume no está tan saludable como debería".
Cada año, un grupo de voluntarios hace una media de tres limpiezas en distintos puntos de la Costa Tropical, "sobre todo después de la época estival que es cuando más embarcaciones de recreo hay y más residuos se generan", ha concluido el propietario de Buceo Calahonda.