Con motivo de la celebración del Día Europeo de la Parada Cardiaca, el Pabellón Joaquín Crespo “Quini”, del Polideportivo Municipal “Francisco Manzano”, acogió el pasado fin de semana una actividad formativa dirigida a los alumnos y alumnas de 4º de Enseñanza Secundaria Obligatoria de los centros educativos de la localidad, con el objetivo visibilizar la importancia de salvar vidas a través del conocimiento de diversas técnicas, y de cómo mantener un estilo de vida saludable reduce las posibilidades de contraer una enfermedad coronaria y cardiovascular.
Así, los participantes tuvieron la ocasión de aprender las maniobras de reanimación cardiopulmonar (RCP), maniobras para evitar atragantamientos y el conocimiento del desfibrilador automatizado, y así poder realizar una primera atención de la parada cardiorrespiratoria hasta el momento de la llegada de los equipos especializados.
Para ello, se contó con un numeroso grupo de docentes, entre ellos profesionales sanitarios del Área de Gestión Sanitaria Sur de Córdoba, concretamente de los Centros de Salud “José Gallego Arroba” y Puente Genil II, así como del Hospital de Alta Resolución de Puente Genil y del Servicio de Urgencias de Atención Primaria Córdoba Sur.
En el desarrollo de esta jornada, también colaboró el Ayuntamiento de Puente Genil, y otras entidades como la Asamblea Local de la Cruz Roja, el Grupo de Actividades de la Naturaleza (GAN), la Escuela Provincial de Atletismo Miguel Ríos, el Club de Pádel “El Silo” y los centros educativos participantes. Todo un ejemplo de coordinación y transversalidad entre diferentes instituciones y entidades.
Según se indicó desde la organización de esta actividad, «jornadas como ésta, permiten acercarnos a los jóvenes y ayudarlos a que aprendan a identificar situaciones de riesgo, y que sepan cómo actuar en ellas, ya que cada minuto que pasa una persona que padezca un ataque, sin recibir la atención adecuada, supone que se reduzcan sus posibilidades de supervivencia un diez por ciento. En España se producen 30.000 muertes por paradas cardio respiratorias al año. Si formásemos a toda la población en RCP, esa cifra se podría reducir un 30 por ciento».
Durante las sesiones formativas, los asistentes han puesto en práctica los consejos y recomendaciones de los profesionales sanitarios para realizar la reanimación cardiopulmonar sobre maniquíes o pacientes simulados, al tiempo que aprenden la secuencia de actuaciones que determinan un aumento de la supervivencia tras sufrir una parada cardiorrespiratoria, lo que se denomina como “Cadena de Supervivencia”, utilizando también los Desfibriladores Semiautomáticos (DESA).