DiLeo señaló que tras el fallecimiento del Rey del Pop el 25 de junio en Los Ángeles, sus parientes se llevaron todos los bienes existentes en la casa alquilada por el autor de Thriller, incluido un ordenador con multitud de temas y colaboraciones con artistas como Ne-Yo, Akon y Black Eyed Peas.
“Ellos pensaron que todo era de Michael, así que se llevaron hasta el mobiliario de alquiler”, afirmó DiLeo, quien acusó a Joe Jackson, padre de Michael, de estar detrás de un intento de modificar el testamento dejado por el cantante en 2002, en el que omitió a su familia de la administración de sus bienes.
Un juez de Los Ángeles confirmó el pasado lunes a los dos ejecutivos nombrados por Jackson en su última voluntad como únicas personas con capacidad para tomar decisiones sobre su patrimonio.