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Ronda

Isabel Barriga: "Si hay diferencias no dudaremos en dejar el pacto"

La teniente de alcalde concede una entrevista a RONDA SEMANAL. Da por cerrada la crisis de Gobierno, pero no duda en marcar el territorio del PA y hablar de un nuevo tiempo político en Ronda. La promoción turística es uno de sus grandes objetivos, según nos cuenta, para este año 2013

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  • Barriga durante la entrevista -

¿Cómo define el presupuesto municipal del que tanto se habla estos días?
—Es un presupuesto realista y austero. Teniendo en cuenta que, por encima de cualquiera de nuestras decisiones, está la Ley Estatal de Estabilidad Presupuestaria, que nos obliga a determinadas conductas. ¿Cuáles son los objetivos? La contención del gasto y el mantenimiento de la plantilla, siempre que podamos, evitando despidos que, ahora, llevarían a cualquier familia a una situación de verdadera marginación social. Y trabajamos en optimizar los recursos y el personal. Como ejemplo le digo que en Turismo de Ronda una empresa externa, totalmente objetiva así por tanto, está trabajando en una relación de puestos de trabajo y funciones para que el funcionamiento de la empresa sea óptimo.
¿El sistema se extenderá a todo el Ayuntamiento?
—Diputación está haciendo una relación de puestos de trabajo para todo el Ayuntamiento. Y en Soliarsa, en cuanto tengamos liquidez y disponibilidad presupuestaria, deberíamos también plantear algo similar, puesto que aunque la Ley nos obliga a amortizar plazas, el servicio en la empresa de limpiezas se está viendo muy mermado, y creemos que hay contrataciones justificadas que debemos asumir. Para ello necesitamos un informe técnico avalado por una relación de puestos de trabajo.
Y eso pese a que han admitido que se llegó a barajar un ERE municipal…
—Usted sabe que posibilidades se han planteado todas, desde reducción de jornada y sueldos, hasta un ERE.
Aunque ha trascendido que el PA se opuso abiertamente en el seno del equipo de Gobierno...
—Nosotros dijimos que, aunque siempre se distingue entre funcionarios y personal laboral, aún entendiendo cómo han accedido a sus puestos los funcionarios, al final todos son trabajadores municipales. Por eso creíamos que un ERE sería injusto, porque atendía a parte de la plantilla. Se han estudiado todas las posibilidades antes de llegar a eso, porque despedir a una persona es un drama. Hemos acordado por eso que no habrá despidos, de no ser que sea estrictamente necesario.
Se ha criticado que el presupuesto del año pasado no tenía serias inversiones. Y ocurre igual este año. ¿Han hecho ustedes todo lo posible?
—Hay que ser realistas. Las inversiones se hacen con aprovechamientos urbanísticos, y ahora mismo no tenemos. No tenemos siquiera Los Merinos. ¿Qué hemos propuesto entonces? La venta de patrimonio, concretamente la Casa del Jalifa. El grupo andalucista tiene un problema con este asunto, y es que siempre nos opusimos a vender patrimonio; pero está el problema de las inversiones. Así, como es necesario, por ejemplo, invertir en el mantenimiento de nuestros monumentos, entendemos que esa es la única posibilidad ahora. Y si sale bien, podremos mejorar nuestros parques y jardines, las calles del casco histórico… La Casa del Jalifa se ha puesto sobre la mesa porque está cerrada y no está adaptada ni puede ahora adaptarse. Así que podría darnos ese otro rendimiento.
Aunque ustedes pusieron duras condiciones…
—Nosotros pusimos sobre la mesa que si se llegaba a vender fuese una venta con condición; propusimos concretamente que quien allí se estableciera debería poner la Casa al servicio turístico y cultural de Ronda. Pero le voy a ser muy sincera: vamos a volver a estudiar esta condición, porque somos conscientes que una empresa que compre ese bien no podrá atender a esa condición, porque ya necesitará una inversión alta para comprar y reformar la Casa del Jalifa. Hemos pedido informes técnicos. No nos cerramos.
El PA ha admitido que uno de los escollos cuando plantearon revisar el pacto era el presupuesto. Pedían que sus delegaciones tuviesen un mayor peso presupuestario. ¿Lo han conseguido?
—Le quiero dejar muy claro. No es cuestión de tener más poder o de brillar más, políticamente hablando. Permítame la expresión: trabajamos con delegaciones muy de calle, con las brigadas operativas, y necesitamos recursos que no teníamos. El ejemplo está en parques y jardines: tenemos cinco trabajadores, y así no se puede. Y por ello se ha previsto una partida para la contratación externa, porque hay muchas zonas verdes. En Obras necesitamos una atención al público en la planta baja, porque hay muchas críticas en la calle por la falta de agilidad… Todo lo que hemos pedido es para mejorar los servicios. También pasa en Turismo: para promocionar es necesario gastar algún dinero. Por poco que sea, pero es necesario gastar algo. Y ya tenemos una partida, que es austera, pero que nos ayudará a esa necesaria promoción.
Así que da por cerrada la crisis de Gobierno…
—Quiero transmitir a los rondeños una idea. Lo nuestro no ha sido ni una pataleta ni un berrenchín. Entendíamos, a mitad de legislatura, que había llegado el momento de poner sobre la mesa nuestro propio plan de acción. Y todo porque es cierto que nuestro partido ha cambiado, porque estamos haciendo lo que hemos defendido siempre, que nuestros cargos orgánicos  no deberían ser los propios cargos institucionales. No podemos poner en duda la capacidad de Daniel Harillo, pero es cierto que le cargamos con muchas responsabilidades. Ahora, una vez que hemos separado esas responsabilidad y un nuevo compañero es el secretario general, se está notando. Estamos haciendo lo que tenemos que hacer: política municipal y política de partido. Y eso, no crea, es difícil cuando se tiene un pacto de gobierno con un partido que es, políticamente hablando, muy muy diferente al Partido Andalucista. Pero la responsabilidad nos obliga al consenso. Así que, resumiendo, le digo que el problema era nuestro: no habíamos hecho nada por el Partido Andalucista. Trabajábamos en el Ayuntamiento y ya está. Y ahora es el partido quien marca directrices y consensúa la línea de trabajo con el grupo municipal. Y en la calle, como el cambio se nota, hay todo tipo de rumores.
Pero no me negará ustedes que ahora sí que están marcando el territorio…
—Es que lo estamos marcando. Está claro. Porque defendimos un programa electoral y la gente esperaba que empezásemos a diferenciarnos. Por ello digo que la culpa no era del PP, sino del PA. No se ha visto nuestra gestión. Así que lo tenemos claro: aunque hay un pacto, nuestra gestión es gestión andalucista.
¿Y lo entiende el PP?
—Sí, claro. Es más: ahora hay más comunicación. Las reuniones de los lunes a las ocho son más productivas y provechosas, más reales e intensas, y eso no sólo redundará en la mejor acción de los dos grupos, sino en el mejor gobierno de la ciudad.
Disipa cualquier duda sobre la permanencia del pacto, así por tanto…
—Yo no digo nunca de esta agua no beberé. Soy sincera, porque nos debemos a nuestro partido y a nuestro secretario general, a nuestro secretario nacional y nuestros comités: si a lo largo de estos años surgen divergencias que hagan que no podamos seguir trabajando, no le quede duda, nos iremos del Gobierno.
¿El grupo municipal está ya totalmente unido?
—Somos un grupo perfectamente cohesionado. Ahora mismo tenemos el gran escollo de que no tenemos al 100 por 100 a uno de nuestros compañeros, por problemas de salud, pero por lo demás, estamos muy unidos, y en plena comunión con el comité andalucista. Y ya le digo, no ponemos en duda el pacto, pero si las políticas de nuestros socios son incompatibles con lo que pensamos, no dudaremos en absoluto pasar a la oposición o tomar cualquier otra decisión. Pero antes buscaremos, como ahora, el consenso, porque a eso nos comprometimos. Pero también a no faltar a los ideales andalucistas.
Según la concejal de Hacienda en 2014 todo mejorará. ¿Está de acuerdo?
—Estoy de acuerdo con eso. Es como en las casas. Hemos hecho tantos esfuerzos y ya sólo podemos ver más luz, y ojalá todo sea mejor, porque será mejor para Ronda. Si hay más ingresos, nuestra prioridad será la Renta Básica.
¿Se sienten entonces responsables del número de parados en Ronda?
—Desde el grupo andalucista nos sentimos responsables de absolutamente todo, incluso de estos datos negativos. La delegación de empleo está en manos del PP, pero somos un equipo de Gobierno y lo asumimos todo. Es cierto que no tenemos competencias activas de empleo, pero es necesario hacer algo más, y por ello en la revisión del pacto hemos pedido sentarnos de nuevo en la mesa del empelo o como querramos llamarlo. Y con todas las fuerzas políticas, que seguro tienen buenas ideas que aportar. Lo vamos a hacer.
El asunto del Albercón y los últimos promotores interesados en desarrollar la zona, ¿no ha sido una oportunidad perdida?
—No hemos dejado pasar ninguna oportunidad. Hemos tomado una decisión política: no vamos a hacer nada ahí. Nuestra zona comercial está delimitada en otro lugar, y no cambiaremos de opinión. Eso lo dijimos a los propietarios al principio de la legislatura, no hemos engañado a nadie. Por cuanto al último proyecto, aunque confiamos en quienes nos lo presentaron, no deja de ser una mera declaración de intenciones que ha procurado un banco, con una decena de declaraciones de voluntad, que no vinculan a ninguna empresa. Dicen que vendrían a instalarse aquí diez constructoras del País Vasco… ¿Usted lo puede creer? No hay obras…
Pero dicen que no se les ha atendido y que ni siquiera han pedido ustedes garantías…
—Los hemos atendido, tanto la alcaldesa como yo. La documentación está en obras y llevaremos este asunto a los redactores del plan general. Pero insisto: lo que traen no vincula a nadie ni da garantías de nada.
¿Cómo está el plan general?
—Estamos en la fase de contestar las alegaciones. CETUR, además, ha presentado una modificación de su proyecto, que hemos enviado a los redactores, para que se sienten con la Junta. Estamos acelerados, también con el plan especial, porque para el nombramiento como Patrimonio Mundial, debemos tener aprobados nuestros planes.
Por cuanto al turismo, decía usted antes que quieren de nuevo fortalecer la promoción de Ronda como ciudad de congresos. ¿Cómo lo harán?
—Creo que hemos hecho una gestión interesante. El Ronda Convention Office, con total respecto, ha gastado dinero e importante subvenciones y no se ha visto el rendimiento. Y por ello hemos decidido no aportar más dinero, pese a que tenemos una participación en él del 49 por ciento. Lo que hemos comprometido es una técnico de turismo, y ahorramos dinero que nos servirá para promocionar el turismo de congresos en Ronda. Estos días, en Madrid, vamos a participar en varias reuniones. Pero bien es cierto que el mundo de los congresos está mermado, porque las empresas están sufriendo mucho. La más importante empresa de organización de congresos en España hace dos semanas que cerró sus puertas por quiebras. Pero hay que ser positivos: Ronda tiene unos espacios inigualables, y no vamos a dejar de venderlos.
Está muy ilusionada con Ronda Romántica…
—Será un gran evento. Esta semana nos hemos reunido con el presidente de Diputación, para ver qué parte pueden subvencionar, al ser un producto comarcal, y creemos que tendremos también el apoyo de la Junta. Creo que estamos trabajando bien y organizados, con todos lo pueblos y peñas y colectivos. Será bueno para Ronda.
Mucha suerte
—Gracias.

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