Rota se rindió ayer a Antonio Trigo y a la expresión musical de sus emociones en un concierto muy personal para el que se agotaron todas las entradas. Un enclave mágico como el patio del Palacio Municipal Castillo de Luna fue el lugar escogido por el compositor y pianista roteño para presentar su último trabajo que lleva por nombre ‘Emotional’.
Un disco que, pese a que lleva varios meses publicado en su edición digital, no había sido interpretado en directo hasta la noche de ayer. Un acto de responsabilidad ante su público del que Antonio Trigo salió más que airoso.
El que es, sin lugar a dudas, el más conocido de los pianistas y compositores roteños por sus discos, conciertos y composiciones para documentales, volvió a hacer alarde ayer de su dominio de la técnica y sentido creativo. Pero, sobre todo, de su sensibilidad y capacidad para crear un clima íntimo y único a través de su música.
Y es que, en esta ocasión, el compositor y pianista no recurrió a casi ningún acompañamiento durante su espectáculo. Tan sólo él y su piano fueron los protagonistas de la mayoría de las piezas interpretadas en este concierto que tanto apeló a las emociones y que encandiló a todos los asistentes.
