San Fernando

Piden 10 años de cárcel para un militar que le sacó un ojo a otro tras discutir por bailar con una mujer

Se trata de Carlos H.C.R. y está destinado en el Tercio de Armada. Los hechos se remontan al año 2008, cuando le estampó a Nelson O.P.U. un vaso de cristal por el que perdió el globo ocular izquierdo.

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La Audiencia Provincial de Cádiz juzgará el próximo viernes, día 14, a un militar destinado en el Tercio de Armada de San Fernando que, tras una discusión con varios compañeros del acuartelamiento por el hecho de bailar en una discoteca con una mujer, provocó lesiones a uno de ellos con un vaso de cristal causándole la pérdida de un globo ocular, hecho por el que la Fiscalía solicita una pena de diez años de prisión.

Según el escrito de calificación fiscal, los hechos ocurrieron el 18 de octubre de 2008, cuando un grupo de militares destinados en la localidad se encontraba en el restaurante Encuentro Latino, donde también estaban otros cuatro militares y una mujer.

Al procesado, identificado como Carlos H.C.R., persona "conflictiva y violenta que ya había tenido problemas anteriormente", pareció molestarle que Nelson O.P.U. bailara con la mujer, por lo que supuestamente comenzó a insultarlo e increparlo, amenazando con un comportamiento "incitador" que ocasionó una discusión entre ambos, siendo separados por el resto.

Pasado algún tiempo, según el Ministerio Fiscal, el procesado continuaba "muy excitado" y "no paraba de mirarle mal" y, para no tener problemas, N.O.P.U. optó por marcharse, siendo seguido "con intención pendenciera" por el procesado, sin que el primero no se diese cuenta. Ya fuera del local, y de forma inesperada al encontrarse a sus espaldas, el acusado "con intención de alcanzarle en la cara", le arrojó violentamente un vaso de cristal contra el rostro, impactando en su ojo izquierdo, causándole la pérdida del globo ocular izquierdo.

A juicio del Ministerio Fiscal, los hechos son constitutivos de un delito de lesiones, solicitando una pena de diez años de prisión, además de la prohibición de no acercarse a la víctima a menos de doscientos metros durante diez años. Además, reclama una indemnización  que supera los 93.000 euros por las lesiones causadas.
 

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