San Fernando

Abierto el nuevo Museo Naval en el edificio de la Capitanía General

Está al 20% de lo que será en un futuro pero supone un paso más en el eje cultural que se extiende a todo lo largo de la calle Real.

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El Museo Naval de San Fernando ha abierto sus puertas al público tras finalizar la primera fase del traslado de sus fondos desde la Población de San Carlos al antiguo edificio de Capitanía General en la calle Escaño.

Cuenta con una sala para exposiciones temporales y un auditorio para el desarrollo de conferencias, jornadas y eventos, entre otros. La muestra permanente cuenta con una selección de piezas sobre el origen de la Armada en el golfo de Cádiz y su relación con la Bahía.  El horario es de 10.00 a 14.00, de lunes a viernes y de 10.00 a 13.00 horas en fin de semana.

El alcalde de San Fernando, José Loaiza, manifestó que con esta apertura, que sólo supone un 20 por ciento de lo que será el museo, se da un paso más en la consolidación del eje cultural de la calle Real que comienza en el castillo de San Romualdo.

Congratulación

La apertura del Museo Naval en Capitanía ha sido el primer paso en la recuperación para La Isla de estas instalaciones. Por este motivo, el grupo municipal que encabeza Gonzalo Alías se congratula del cumplimiento inicial de su propuesta en el pasado mes de julio. Así mismo, exige a la mayor brevedad el inicio de las conversaciones con Defensa para desarrollar el proceso de participación para la apertura de los jardines y la configuración de ese espacio clave en el desarrollo de la ciudad.

IU propuso en una moción presentada en el Pleno de julio de 2014 que se iniciaran gestiones con el Ministerio de Defensa para agilizar la reconversión de la antigua Capitanía en Centro Cultural y Museo Naval, así como para cumplir las previsiones del planeamiento urbanístico vigente, abriendo los jardines al uso ciudadano como espacio libre de uso público. Del mismo modo, propuso estudiar la posibilidad de solicitar a Defensa la utilización de algunas de sus instalaciones para dependencias municipales o para desarrollar determinadas actividades.

Este nuevo equipamiento se sitúa en el eje cultural que se configura a lo largo de un amplio tramo de la Calle Real, desde el Real Carenero, Puente Zuazo y sus fortificaciones, hasta la Iglesia del Carmen, pasando por la Venta de Vargas, el Castillo de San Romualdo, el Museo Histórico Municipal, la Iglesia Mayor, el Teatro de las Cortes, la Plaza del Rey y el Ayuntamiento, la Alameda Moreno de Guerra, la Iglesia de San Francisco, la Casa Lazaga y la Compañía de María, sin olvidar otras edificaciones de interés que flanquean esta calle.

De este modo, la calle Real queda configurada como un importante eje patrimonial y cultural que incrementará los atractivos turísticos de la Isla, y que se puede recorrer a través de un amplio espacio peatonal.

Entre las propuestas que IU incluyó en su moción para mejorar Capitanía, se propuso recuperar los Jardines de Capitanía. Se encuentran en una zona del centro histórico que apenas tiene espacios de este tipo. Tanto el barrio de La Pastora como la amplia zona urbana situada al otro lado de la Calle Real son muy deficitarios en espacios libres. El vigente planeamiento urbanístico municipal -PGOU (Plan General de Ordenación Urbanística) y PEPRICH (Plan Especial de Protección de Conjunto Histórico)- determinan que los jardines deben pasar a ser un espacio libre de uso público.

En último lugar, la propuesta de Izquierda Unida daba la oportunidad de utilizar Capitanía, aunque fuera de forma provisional, como sede de alguna dependencia municipal. Del mismo modo, se considera su ubicación para celebrar ciertas actividades, como los Plenos del Ayuntamiento hasta que se consiga culminar la rehabilitación de la Casa Consistorial.

La votación en contra del Partido Popular en el Pleno de julio demostró la escasez de atención al PGOU de Loaiza, un PGOU donde la participación ciudadana brilló por su ausencia. Apenas un mes más tarde, el equipo de PP y PA tuvo que desdecirse para acabar apoyando esta propuesta de Izquierda Unida. De este modo, empieza la recuperación de estos terrenos para uso y disfrute de las y los cañaíllas, a los que se propone que participen en la construcción del nuevo modelo de ciudad para La Isla.

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