La Guardia Civil de Tráfico de San Juan de Aznalfarache (Sevilla) investiga al conductor de un turismo que circulaba a 219 kilómetros por hora en un tramo de la autovía A-66, concretamente en el término municipal de Guillena en sentido Sevilla, en el que la velocidad está limitada a 120 kilómetros por hora.
El conductor se enfrenta a una pena de prisión de tres a seis meses, multa de seis a doce meses o trabajos en beneficio de la comunidad durante treinta y uno a noventa días, y, en cualquier caso, con la de privación del derecho a conducir vehículos a motor por un tiempo de uno a cuatro años, según ha recordado la Guardia Civil este martes en una nota.
Según el Instituto Armado, el conductor "podría haber puesto en grave riesgo al resto de los usuarios debido a la multitud de desplazamientos que se realizan en época estival, así como la cercanía a municipios aledaños a la capital andaluza". Se han instruido diligencias contra el conductor, diligencias que han sido entregadas en el juzgado en funciones de Guardia de Sevilla (Sevilla) al no tener el conductor nacionalidad ni residencia "constatable" en España.