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Sevilla

El Ayuntamiento afirma que el Sopa de Ganso superaba el aforo permitido y había "incumplido un precinto anterior"

La Policía Local ha precintado el local de la Alfalfa

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El Ayuntamiento de Sevilla ha justificado el precinto realizado en la noche de este sábado por parte de la Policía Local al bar-restaurante Sopa de Ganso de la Alfalfa indicando que el establecimiento superaba "con creces" el aforo permitido, toda vez que la licencia que tiene en vigor es "de restaurante y no para bar de música", teniendo en cuenta además que había "incumplido otro precinto anterior".

   Así lo han indicado a Europa Press fuentes municipales, que también han añadido que se habían recibido "varias denuncias de vecinos" con quejas "reiteradas y constantes por ruido", motivo que también ha justificado el precinto del local en esta zona del centro de la ciudad, declarada como acústicamente saturada por el propio Ayuntamiento.

   Según han señalado desde el Consistorio, la Policía Local precintó el establecimiento este sábado siguiendo una resolución administrativa de Medio Ambiente tras haber "inspeccionado" el local.

   De este modo, el Ayuntamiento ha asegurado que Sopa de Ganso "tiene licencia para restaurante", si bien destacan que les consta que se había solicitado "una ampliación para bar con música" pero que este extremo "no está incluido en el nomenclator de actividades" dentro de la normativa municipal, por lo que no había sido concedida.

   Por su parte, el propietario del negocio, Luis Arévalo, afirma que el establecimiento sí cuenta desde hace años con una licencia de "restaurante con ampliación de música", y que si bien esta ya no está contemplada dentro de las establecidas por el Ayuntamiento o la Junta, ha intentado "sin éxito" reunirse en los últimos meses con el responsable municipal de Medio Ambiente para ver qué opciones tenía el establecimiento para continuar su actividad de forma reglada.

   Asimismo, Arévalo ha avisado de que si el precinto no se levanta en las próximas dos semanas, se verá obligado a cerrar este bar que lleva en la ciudad desde 1986, ya que apunta que no tiene "capacidad económica" para abonar los 3.500 euros que paga de alquiler por este local en pleno casco histórico, así como impuestos y sueldo de cinco personas, con el bar cerrado. También ha asegurado que, si llega a producirse esta situación, no dudará en "demandar al Ayuntamiento" y solicitarle una indemnización.

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