La Universidad de Sevilla (US) cuenta ya con datos cerrados en lo que respecta a las matriculaciones del presente curso académico 2014-2015, dándose una leve bajada del 2 por ciento en las mismas respecto al ejercicio anterior --59.103, de los cuales 55.628 se adscriben a los Grados, frente a las 60.319 del curso 2013-2014--, no obstante lo cual la sede académica remonta un 3,5 por ciento en las matrículas de Másters (3.475) y una tendencia a la baja en casos puntuales detectados de alumnos que han tenido que abandonar los estudios por falta de medios económicos para el pago de los gastos pertinentes, y que la institución confía en acabar erradicando.
La vicerrectora de Estudiantes de la US, Pastora Revuelta, ha explicado a Europa Press que el "insignificante" retroceso en el número de matriculados se debe fundamentalmente a las titulaciones en extinción --las antiguas licenciaturas LRU--, lo que deriva en que "básicamente se mantienen los mismos números".
En este sentido, el contexto socioeconómico de crisis sigue sin repercutir en una bajada significativa del número de estudiantes, que, sin embargo, sí se ven perjudicados en este apartado por la política de concesión de becas.
Aunque la convocatoria 2014-2015 se encuentra aún en fase de resolución, la conclusión del curso pasado en este sentido es, para Revuelta, "negativa". "Es verdad, según el Ministerio, que hay más estudiantes con becas, pero ello solo afecta a las ayudas de matrícula y no a la cuantía económica de ayuda social", ha expuesto, en referencia a conceptos como el transporte, la comida o la residencia.
De hecho, la vicerrectora de Estudiantes de la Hispalense ha aportado un dato definitorio: mientras que en el curso 2012-2013 la US registraba 2.036 alumnos con expediente "brillante" y familias con el umbral de renta más bajo a los que se les otorgaba una beca de más de 6.000 euros anuales, en la campaña siguiente ningún estudiante de estas características académicas --"cuyo número no ha decrecido"-- ha logrado una ayuda de tal cantidad: unos 1.600 recibieron de 2.500 a 3.000, y otra cifra similar, de 3.000 a 3.500 euros.
"Es un recorte tremendo: los chicos reúnen todos los requisitos, con una situación económica familiar mala, se han esforzado más, pero como el reparto de ayudas en cuantía variable ha bajado, ésa es la ayuda que les ha tocado", lamenta Revuelta.
LA MITAD DE LOS ALUMNOS FRACCIONA EL PAGO
Con todo, estos alumnos, en líneas generales, "pasan las dificultades que sean y se buscan la vida, pero siguen". No obstante, sí se ha detectado una bolsa de alumnos que abandonan por impago, bien por dificultades económicas o por agotar convocatoria: el número es "bajísimo" y no llega al 1 por ciento de los 60.000 estudiantes de la Hispalense, pues el curso pasado "no llegaron a 700" --en el 2012-13 hubo unos 1.000--, y con las medidas implantadas en este curso, fundamentalmente el fraccionamiento de pago, se espera que ese número "baje todavía más y se salve a la gente que no pagaba porque no tenía medios".
En cuanto a la ampliación de plazos para abonar la matrícula, la vicerrectora ha confirmado que unos 30.000 alumnos, la mitad del total, se han acogido a esta fórmula. "Teniendo en cuenta que era el primer curso que poníamos este sistema, se ha desarrollado bastante bien, con pocas incidencias", ha manifestado.
Por último, ha confirmado que la Hispalense movilizará un presupuesto de más de tres millones de euros para ayudas, incluyendo la convocatoria de un nuevo Plan Propio de Ayudas al Estudio que, al igual que en 2014, habilitará algo más de 2.000 becas, sin perjuicio de que posibles remanentes de otras partidas puedan invertirse en este concepto, como ya ocurrió el pasado año, en el que se acabaron tramitando 124 ayudas más.