La Gerencia de Urbanismo ha decidido elevar al pleno el “desistimiento” de la modificación puntual del PGOU para transformar la pasarela peatonal de Torneo en un puente para el tráfico rodado, como pretendía el anterior Gobierno del PP, y ha decidido realizar una reordenación del entorno de la Torre Pelli, incluyendo una “rotonda pera” sobre la que girará todo el tráfico.
Según el concejal de Hábitat Urbano, Antonio Muñoz, el puente para tráfico rodado “no es la solución” al impacto en materia de movilidad asociado a la entrada en funcionamiento de la Torre Pelli, por lo que ha apostado por soluciones “globales”, entre ellas la llegada de la línea de trenes de Cercanías y su conexión con la estación de metro de Blas Infante, lo que constituiría “la solución definitiva”.
Mientras llegan estas infraestructuras, se ha apostado por adecuar la gran intersección de la avenida del Cristo de la Expiración, en los aledaños de la torre para acondicionar los espacios comprendidos entre el Pabellón de la Navegación, la prolongación del Camino de los Descubrimientos y el puente del Cristo de la Expiración.
Así, estas actuaciones implican la transformación de esta gran intersección en “una rotonda en forma de pera” para permitir el acceso desde la misma, hacia la avenida de los Descubrimientos. Las obras arrancarán en torno al 22 de septiembre, durarán unos dos meses y no supondrán cortes totales en el viario.
Estas actuaciones arrancarán en torno al 22 de septiembre, con una duración de dos meses, para convertir la intersección en “una rotonda en forma de pera” que permita el acceso desde la misma hacia la avenida de los Descubrimientos mediante la ampliación de un carril de la calzada de entrada a Sevilla, la reforma de dos tramos que conforman los giros de la intersección para incrementar las longitudes y la capacidad de la propia intersección, la reforma de los grupos semafóricos para adecuarlos a la nueva ordenación, la remodelación de la señalización horizontal y vertical y la reforma del alumbrado, así como actuaciones en las redes pluviales y la jardinería.
En las reuniones de coordinación entre Ayuntamiento, entidad financiera y empresa adjudicataria de las obras, se ha trazado un plan de actuación donde no hay previstas afecciones significativas al tráfico al no acometerse cortes totales del viario.
El aparcamiento de la torre, por cierto, está ya abierto pero sólo para “unas 1.672 plazas de coche y 121 de moto”, por lo que buena parte de sus espacios permanecen aún cerrados.
