Las negociaciones entre la Consejería de Cultura y Adepa entorno a las Reales Atarazanas se han topado con un nuevo obstáculo. Quien pone la barrera esta vez es la Junta de Andalucía (propietaria de los antiguos astilleros) que, en la última reunión mantenida este miércoles con la asociación conservacionista, puso sobre la mesa incluir que el salón de actos del proyecto museístico para Atarazanas esté ubicado en la planta de arriba del monumento, con la inmediata negativa de Adepa. Los conservacionistas, que ya lograron al inicio de las conversaciones iniciadas hace ya casi nueve meses que Cultura retirase del proyecto inicial de Guillermo Vázquez Consuegra la cafetería que iba en la planta superior, no comprenden ahora “este nuevo paso atrás” y que ahora se proponga una nueva edificación en este nivel. “Si quitan la cafetería ante nuestra advertencia de que se sobrecargarían las estructuras, está fuera de lugar que ahora nos propongan que el salón de actos vaya en la planta superior”, señala a Viva Sevilla Joaquín Egea, presidente de Adepa.
Tras nueve meses sigue en juego que los conservacionistas retiren el recurso que interpusieron en mayo de 2016 en los juzgados en contra de la licencia de obras y que ha imposibilitado por el momento el inicio de los trabajos de restauración en el monumento con el objetivo de convertirlo en un nuevo centro museístico. La Caixa se ha comprometido a invertir para ello 15 millones de euros.
La posible nueva ubicación del salón de actos en el proyecto para las Atarazanas, que ahora se encuentra en el espacio que ocupó la antigua fundición de los astilleros que ya fue rehabilitada por la Junta en el 2004 con un coste de 490.000 euros, no es el único nuevo escollo. Cultura también trasladó a Adepa en la reunión de este miércoles la intención de conservar las cuatro naves de la planta superior, mientras que con anterioridad se habían comprometido a retirarlas precisamente para aliviar la estructura. “Esto es una especie de tira y afloja. Nos conceden algo importante y nos quitan otra cosa”, critica Egea.
Los avances
En el marco de las negociaciones, la Junta ya ha accedido a realizar una serie de “modificaciones sustanciales” tales como cambiar el sistema de cimentación a través de micropilotes para evitar perforaciones, a eliminar la cafetería de la planta superior y a cambiar la entrada del monumento a su acceso histórico por la calle Temprado en vez de por Dos de Mayo. Además, y entre otros aspectos, la Junta habría aceptado a excavar una de las naves (la séptima), pero los conservacionistas piden como condición para retirar el recurso que se excaven al menos dos (la quinta y la sexta o la sexta y la séptima).