Después de que el Ayuntamiento hispalense recepcionase las obras acometidas por la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) en el Canal de Ranillas, fruto del acuerdo alcanzado en 2003 entre ambas partes, Participa Sevilla ha avisado este miércoles de que lejos de la filosofía inicial de "restauración hidrológica y forestal", dicha actuación se ha traducido en la creación de "un nuevo espacio duro y un muro que separa aún más Sevilla Este y Parque Alcosa".
La portavoz municipal de Participa Sevilla, Susana Serrano, ha manifestado en un comunicado que estas obras del Canal de Ranillas responden al citado convenio de 2003, que contemplaba un "Plan de Restauración Hidrológico-Forestal y de protección de cauces en el municipio de Sevilla".
Pero en vez de "una nueva zona verde que integrara el arroyo Ranillas en la ciudad y que conectara los parques del Tamarguillo, Guadaira e Infanta Elena, tenemos un nuevo espacio duro y un muro que separa aún más a Sevilla Este de Parque Alcosa", según Serrano.
La actuación realizada en el Canal de Ranillas, según la concejal, "se limita a la construcción de un vallado alrededor del trazado del arroyo y una serie de pasos elevados sobre el mismo". "No se ha sustituido la actual cubierta, en situación ruinosa, ni se ha recuperado este área como zona verde para el barrio, tal y como reclamaban las entidades vecinales", ha criticado.
"Es una actuación sin ningún tipo de sentido, tanto en lo ambiental como en lo social", ha lamentado la portavoz de Participa Sevilla, exponiendo que además de crear "un nuevo muro que divide dos zonas de la ciudad, supone una ocasión perdida para reverdecer los espacios públicos y amplía el número de espacios duros que pueblan la ciudad".
"Desde Participa Sevilla apostamos por crear una nueva red verde de espacios libres que una a los parques del extrarradio para potenciar su uso como áreas de movilidad sostenible, educativas, de esparcimiento, deportivas, históricas y de carácter social de Sevilla", según Serrano.