Rubén Pozo llega a Sevilla con su gira Habrá Que Vivir, titulo de su flamante trabajo discográfico. La cita mañana sábado en la Sala X.
Ya lo han disfrutado en Valencia, Valladolid, Huesca, Zaragoza y hoy en Córdoba. En las próximas fechas seguirá viajando por toda la piel de toro, visitando ciudades como Barcelona, Madrid, Vigo, Granada. Palma de Mallorca y Murcia.
El ex de Pereza conversó con la redacción de Viva Sevilla.
¿Qué sensaciones tiene antes de enfrentarse al público sevillano?
Tengo muy buenas vibraciones con la gente de por aquí. En Sevilla en concreto siempre me han recibido muy bien y ha venido mucha gente a los conciertos. Tenía ganas de venir de nuevo a Sevilla.
¿De que hablan las letras de ‘Habrá que Vivir’, qué nos cuenta en este nuevo disco?
Bueno… no es un disco muy comercial. Las canciones hablan de las vivencias que te da cumplir de cuarenta años hacia arriba, de lo bueno y lo malo de la madurez y de adaptarse a esta nueva etapa
¿Qué diferencias hay entre En Marcha, el álbum de 2015 y este ‘Habrá que Vivir’?
Hay más diferencias que similitudes, sobre todo sonoramente. En Marcha es un disco en el que está todo muy pensado. Está grabado pista a pista, con mucho detalle. Tarde mucho en grabarlo. Dentro del rock es un disco con un sonido muy limpio. Habrá que Vivir lo hemos grabado toda la banda a la vez y no hemos tardado mucho. Esa es la principal diferencia, Habrá que Vivir suena más natural.
¿Quiénes te acompañan en esta gira?
Vamos en el formato más clásico, dos guitarras, bajo, batería, voz y coros. Me acompañan Manu Garaizabal a la guitarra, Ángel Herranz al bajo y Simón Cordero a la batería.
Ya está disponible en sus versiones CD, vinilo y digital. ¿Por qué lo lanza también en vinilo?
Porque tengo un plato... (risas). Quería poner mi disco y escucharlo en un plato (más risas). A mí pilló una época, los noventa, en que llegaba el CD. En mi anterior etapa no lo hice y ahora era el momento de editar un vinilo. También escucho Spotify, ¡eh!. Pero me gusta esa liturgia de sacar las caratulas, mirarlas y disfrutar del sonido del vinilo. Además, hasta ahora estoy vendiendo más vinilos que CDs.
¿Qué experiencias le dejó la gira con Mark Olson?
Una experiencia muy didáctica, aprendí muchas cosas y detalles del country, que me encanta. Fue todo un poco por casualidad. Yo estaba tocando en un garito en León y el tocaba al día siguiente en el mismo escenario. Fue a ver mi show y le gusto mucho, a partir de ahí surgió lo de girar con el. Me descubrió grupos que no conocía, formas de tocar diferentes. Estuvimos un mes conviviendo juntos. Fue una excelente experiencia.
¿Cree que el panorama rockero, en general, español goza de buena salud?
Hay bandas como Pájaro, de Sevilla, que tiene una propuesta muy interesante, El Canijo de Jerez, tanto en solitario como lo que hacían Los Delincuentes, Juanito Makande me gusta también, Los Bengala, un grupo de Zaragoza que van a guitarra y batería o Los Vinagres, de Canarias. No sé si el rock español goza de buena salud o no, pero si sé que yo escucho bandas de rock que me gustan mucho.