El
Pleno municipal ha
aprobado este lunes el
Presupuesto para el año que viene. Previsiblemente,
entrará en vigor tras las fiestas de Navidad, lo que lo convertirá en el más tempranero de cuantos ha tenido la ciudad, han subrayado tanto el Gobierno municipal, sustentado por el PSOE, como Adelante Sevilla, la formación política que con su voto, pactado desde hace más de un mes, ha permitido que el Presupuesto salga adelante, dando carpetazo así a un ejercicio con el Presupuesto prorrogado por falta de acuerdo entre las fuerzas políticas.
Para 2020, las arcas públicas dispondrán de
1.029 millones de euros, 63 millones más que en el anterior Presupuesto, un 6,5% más. La
inversión prevista superará los
91 millones de euros, lo que equivale a un crecimiento del 15% (11,9 millones de euros). El Gobierno municipal y Adelante Sevilla han recalcado que se trata de unas cuentas sociales con las que
combatir las “desigualdades”. Desigualdades como consecuencia de la falta de oportunidades laborales y de formación y las derivadas del cambio climático.
Hasta aquí, lo ya conocido de un proyecto que si algo ha evidenciado es la brecha, cada vez más acentuada, entre la bancada de la derecha (PP, Cs y Vox, que han rechazado los Presupuestos) y la de la izquierda (PSOE y Adelante Sevilla): las “tres derechas” frente al pacto presupuestario “populista” con el que se “cae la careta de moderado”, en alusión directa al alcalde Juan Espadas.
“Usted ha roto este Pleno en dos”, ha llegado a recriminar el PP al alcalde, al que las tres fuerzas de derechas han acusado de “dinamitar cualquier pacto o negociación” con otros grupos.
Empezando por el final, Espadas ha cerrado el Pleno con una intervención en la que ha enfatizado el hecho de que
la aprobación del Presupuesto hace que la ciudad “recupere la normalidad”. “Hoy es un buen día para Sevilla, con un Presupuesto que bate récord en políticas sociales, en modernización ecológica y en inversiones en todos los barrios”, ha manifestado.
Espadas ha centrado su intervención fundamentalmente en el PP, grupo cuya abstención en 2018 permitió sacar los últimos Presupuestos, todavía vigentes al tener que ser prorrogados este ejercicio. “El drama de la derecha es que este gobierno gobierna para todos. Los sevillanos fueron contundentes en las últimas elecciones municipales. Confiaron en este alcalde antes que en usted (en alusión a Beltrán Pérez, portavoz municipal del PP). Ése es su drama, que no acepta que lleva 20 años siendo concejal”. El alcalde ha afeado también las palabras del portavoz adjunto del PP, Rafael Belmonte, en su turno de explicación de voto. Una intervención en la que ha calificado a Espadas como “el burlador de Sevilla” y el “alcalde de la mugre”. “Debería haber medido sus palabras”, ha criticado Espadas, después de calificar la exposición de Belmonte de “monólogo aparentemente divertido”.
La portavoz de
Adelante Sevilla, Susana Serrano, ha defendido que el Presupuesto
es “el mejor posible” y que la acción de su formación en el mismo ha conseguido “redireccionar el barco”. Frente al
“teatro” denunciado por
Vox y a las continuas advertencias del portavoz de
Cs, Álvaro Pimentel, a que
las cuentas volverán a ser “papel mojado” por la “incapacidad” de ejecutarlas, el portavoz del PP,
Beltrán Pérez, defendió antes de entrar en materia una enmienda a la totalidad del proyecto pactado entre el PSOE y Adelante. “
Rechazamos sus presupuestos por las formas y por el fondo. Las formas han sido impresentables. Y en cuanto al fondo, este Presupuesto no responde al modelo de ciudad que crea empleo”, ha explicado Pérez. “La vida sigue igual y puedo ir a peor”, ha resumido el jefe de filas de los populares en el Ayuntamiento. “Lo mejor que le puede pasar a Sevilla es que no salgan estos presupuestos”, ha apostillado a renglón seguido el concejal de Vox, Gonzalo García de Polavieja, que, una vez más, ha vuelto a reiterar que la presentación de enmiendas, ya fuera a la totalidad o parciales, era un “paripé”. Pimentel (Cs), por su parte, ha lamentado que estos presupuestos “metan la mano en el bolsillo” a los sevillanos. “No vamos a ser cómplices de unas cuentas que no contribuyen a la economía. No hay política más antisocial que la que deja sin ejecutar partidas presupuestarias”, ha apostillado.
Ante las calificaciones de “lacayos” por parte de la bancada de la derecha, el portavoz adjunto de Adelante Sevilla,
Daniel González Rojas, ha pedido “sosiego” y ha reivindicado el sello de su formación en los presupuestos. “
La defensa de lo público es nuestra línea roja”, aludiendo a la paralización de privatizaciones en empresas como Tussam, “que ha sido un problema”, ha reconocido. Y ha dejado claro un mensaje a los “compañeros del PSOE”: “
Vamos a ser muy exigentes. No repitan los errores del pasado y dejen los proyectos en los cajones. Cruzamos el rubicón. De ustedes depende que este acuerdo llegue a buen puerto”.
La delegada de Hacienda,
Sonia Gaya, encargada de hacer la defensa del Presupuesto, ha remarcado el hecho de que la política social del Gobierno municipal queda “plasmada en números” en estas cuentas, en las que la prioridad es “la lucha contra las desigualdades”.