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Sevilla

Precariedad laboral y pandemia pasan factura a la salud

Más de la mitad de los trabajadores encuestados creen que su salud empeoró durante el último año con la crisis sanitaria, según un estudio

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  • Precariedad laboral y pandemia pasan factura a la salud. -
  • El sindicato CCOO exige mejorar los salarios y las condiciones laborales para corregir esta situación
  • Según Cuaresma, “el estudio deja claro que la precariedad laboral es un factor absolutamente determinante para nuestra salud"

Un estudio de CCOO, el Instituto Sindical de Trabajo, Ambiente y Salud (ISTAS) y la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) ha revelado cómo la pandemia y la precariedad laboral están pasando factura a la salud mental de los trabajadores.

Más de la mitad de los trabajadores encuestados aseguran que su salud ha empeorado durante la crisis sanitaria, un resultado 16 puntos superior al del pasado año. Y es que, según los resultados del estudio, el 60,6% está en una situación de riesgo de mala salud mental, más del triple que hace cinco años. Esta situación es más grave entre los trabajadores más jóvenes, las mujeres y quienes tienen salarios más pobres que no cubren las necesidades básicas.

La secretaria de Organización de CCOO de Sevilla, Pepa Cuaresma, ha subrayado que “la precariedad afecta muchísimo a nuestra salud. Es algo que vemos en nuestro día a día y que corroboran los datos de este informe. Por eso, cuando desde CCOO reclamamos un incremento del salario mínimo, una mejora salarial en el convenio, la derogación de la reforma laboral o un cambio en la tipología de los contratos para evitar el abuso de la temporalidad no solo estamos hablando de dinero, sino también de nuestra salud y de nuestra vida, porque las condiciones en las que trabajamos determinan nuestra calidad de vida”.

El informe ‘Condiciones de trabajo y salud tras un año de pandemia’ también refleja cómo la mitad de las personas en puestos de ejecución están expuestas a alta tensión en el trabajo, una situación que es mayor entre ayudantes de cocina, preparadores de comida rápida, camareros o auxiliares de geriatría.

Esta alta tensión aumenta los riesgos de sufrir cardiopatías coronarias, ansiedad o depresión.

La encuesta también revela que el 40,7% de los trabajadores tiene problemas de sueño muchas veces o siempre, casi un 25% ha consumido tranquilizantes o somníferos en el último mes y un 17% ha hecho lo propio con analgésicos opioides.

Según Cuaresma, “el estudio deja claro que la precariedad laboral es un factor absolutamente determinante para nuestra salud. Las personas que llevan a cabo tareas manuales, quienes tienen empleos más precarios, las mujeres y las personas jóvenes son quienes sufren mayores problemas de salud”.

Ante esta situación, la secretaria de Organización de CCOO de Sevilla apuesta “por poner la salud en el trabajo en el centro de las agendas políticas y en exigir a los empresarios que cumplan la Ley. En primer lugar, porque los trabajadores nos jugamos la vida: en Sevilla muere una persona en el trabajo cada once días; y en segundo lugar, porque nuestra calidad de vida depende de nuestras condiciones de trabajo”, sentencia Cuaresma.

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