El hecho de que la pista de Skate fuera de madera, lo que permite mayor seguridad para los practicantes de este deporte, fue determinante para que ni siquiera la rápida actuación de los Bomberos pudiera evitar los importantes daños ocasionados, que dejan totalmente inservible una instalación modélica de la que se ven privados ahora los amantes del Skate.
Por el momento se desconoce la identidad del autor o autores de este nuevo acto vandálico, en el que podría haberse empleado algún producto acelerante para favorecer la expansión del fuego, tratándose de la cuarta vez que la pista de Skate es el escenario elegido por los vándalos para hacer daño a enseres o instalaciones públicas, por lo que todo apunta que, dados los daños ocasionados, esta instalación no volverá a ponerse en actividad.