Izquierda Unida denuncia el silencio al que ha estado sometido un hecho que consideran dramático, violento e injusto, y que mantuvo encerradas a miles de personas durante algo más de un año en un campo de concentración situado en la localidad.
El representante de la formación en el Ayuntamiento, David Tejeiro afirma que “con ella solo se pretende hacer un reconocimiento público a las más de 4.000 personas que allí sufrieron encierro en condiciones infrahumanas solo por no sumarse a la sublevación fascista”.
La investigación histórica revela que “el 30 de marzo de 1938 comienzan a llegar prisioneros al campo de concentración de Torremolinos...un infernal campo de concentración sin barracones ni letrinas, situado completamente al aire libre”.
La moción señala que “dicho campo de ubicaba en terrenos del Cortijo del Moro, delimitado por unas alambradas que comprenderían un rectángulo irregular cuyos extremos lo formarían hoy en día La Casa de la Música, el muro sur del campo de fútbol de El Pozuelo, el parque acuático y, desde los pinos en línea recta hasta el centro de menores Virgen de la Esperanza, en El Calvario, incluyendo también un buen tramo de la Avenida Rafael Gómez Sánchez (hoy Avenida de La Libertad) y los lugares conocidos antiguamente como la Alberca San José, el Arroyo Juan Ríos, Los Granaíllos y La Vistilla”.
El 1 de abril de 1939, el número de presos censados en este campo de concentración ascendía a 4.494.
El portavoz del Grupo Municipal de Izquierda Unida, David Tejeiro, señala que “ es increíble que muchos vecinos de Torremolinos aún ignoran que a pocos metros de este mismo Ayuntamiento existió un campo de concentración fascista”. Por todo ello, Izquierda Unida propone que se erija en la explanada de aparcamientos frente al Campo de Fútbol de El Pozuelo un monolito en homenaje a las personas “que sufrieron injusta prisión en ese campo”. Que se incluya una placa con el texto “En este lugar hubo un campo de concentración franquista en los años 1938 y 1939. Sirva esta placa de homenaje a las miles de personas que aquí sufrieron privación de libertad en condiciones infrahumanas”.
La propuesta también incluye que se declare el 30 de marzo festividad local, con el nombre de “Memoria de las personas prisioneras del campo de concentración de Torremolinos” o uno similar. Además, se solicita que “cada año en la misma fecha se realice un acto institucional en memoria de las víctimas y en defensa de los principios democráticos y republicanos que las tropas franquistas aplastaron a sangre y fuego en nuestro municipio y en el resto del Estado”.
