Jaume Matas se quejó ayer, en una entrevista concedida a la radiotelevisión autonómica IB3, de que se ha quedado sin su trabajo en una compañía americana, con la que tenía un “muy buen contrato”, a raíz de las medidas cautelares dictadas por el juez del caso Palma Arena, José Castro, del que dice que ha dictado una “sentencia” sin probar ninguna acusación.
El presidente balear, Francesc Antich, reconoció ayer que ni él ni muchas familias de Baleares podrían pagar la fianza de tres millones de euros que ha abonado el ex dirigente del PP Jaume Matas por el caso de presunta corrupción referido a la construcción del velódromo Palma Arena.
El pago de la fianza de Matas se hizo efectivo el martes en la cuenta de Banesto habilitada a estos efectos mediante una transferencia bancaria en la que sólo figura como origen el Banco de España.
Según el Tribunal Superior de Justicia de Baleares, la defensa de Matas ha detallado al juzgado de instrucción número 3 de Palma que la fianza se ha abonado en dos pagos de 1,5 millones de euros desde sendas cuentas en el Banco de Valencia y la Caja de Arquitectos Sociedad Cooperativa de Crédito, una entidad en la que tenía depósitos cuando era presidente del Govern.
El juez José Castro dio por constituida la fianza que le impuso al ex ministro de Medio Ambiente, medida ordenada junto con la retirada del pasaporte, la prohibición de abandonar el país y la obligación de comparecer en sede judicial los días 1 y 15 de cada mes.