Jerez

Las heladas dañan el 80% de los aguacates y el 50% de los cítricos

Las temperaturas de siete grados bajo cero que se han registrado de manera continuada en el campo han puesto en una situación delicada al sector

Publicidad Ai Publicidad Ai Publicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad AiPublicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad Ai
  • Heladas en Tesorillo. -
A perro flaco todas son pulgas. Así se podría definir la situación del campo en la comarca. A un año que ya estaba siendo complicado debido a la falta de lluvias, ahora hay que sumarle los daños que han causado las heladas de las últimas semanas en las plantaciones de aguacates y cítricos. Los agricultores del Campo de Gibraltar calculan que las bajas temperaturas registradas en los últimos días han acabado con el 80% de los aguacates y el 50% de los cítricos.

Y es que en Jimena y en San Martín del Tesorillo se han llegado a registrar temperaturas de siete grados bajo cero, un frío inusual para la zona, que en inviernos fríos llega a mínimas de cuatro bajo cero.

Juan Salido, responsable de Coag en el Campo de Gibraltar, subrayó que no sólo el intenso frío ha sido el culpable de las pérdidas en el campo, sino que hay que sumarle la persistencia de temperaturas muy bajas durante varios días.

“Un árbol de aguacate aguanta un golpe de frío, pero no resiste varios días a temperaturas por debajo de los cero grados. El cítrico tampoco lo resiste aunque tiene un poco más de capacidad”, explicó. Salido recordó que en 2005 se llegaron a alcanzar los 10 bajo cero. “Tuvimos muchos daños, pero ahora es peor. En aquella ocasión fue un día puntual, pero la persistencia del frío es lo que está matando a los árboles”.

Pérdidas
Los agricultores calculan que un 80% de los árboles de aguacates están dañados, y, por tanto van a ver afectada su floración para el año que viene. COAG prevé que un 50% de los que viven de este cultivo van a tener que replantearse eliminar el cultivo y volver a plantar nuevo.

Para colmo de males, el aguacate no es una planta asegurable por las compañías, ya que se encuentra en una zona límite.

El responsable de COAG en la comarca explicó que los agricultores abandonaron hace años los cultivos de maíz y algodón porque ya no eran rentables. Por ello, reconvirtieron 600 hectáreas de terreno aproximadamente en plantaciones de cítricos y aguacates. Aunque el cítrico que sale del Campo de Gibraltar es de gran calidad, los agricultores también apostaron en gran medida por el aguacate, aunque no fuera asegurable, porque los precios eran más rentables. Por ello, en la comarca hay unas 300 hectáreas plantadas de árboles de aguacate.

En cuanto al daño que las heladas han causado en los cítricos, es difícil de predecir, ya que los síntomas tardan más en aparecer. No obstante, Salido prevé que un 50% de la cosecha se perderá. Además un 30% de los árboles tendrá problemas con la floración el año que viene.

Esta dramática situación en el campo de la comarca se debe a un fenómeno que los trabajadores del campo conocen como escarcha negra. Así llaman al efecto que causa sobre las plantas el viento polar frío y seco. A simple vista no se aprecian los daños, pero los agricultores saben que debido a la falta de humedad el viento seca a la planta.

Hasta ahora, se había dado el fenómeno de la helada blanca, que se produce cuando sopla el viento más húmedo. Con la helada blanca la planta no sufre tanto. “El propio árbol se refrigera con la humedad, si el viento es seco le saca el jugo a la planta y se seca”, ilustró Juan Salido.

Los daños dependen también de la zona donde se encuentren los cultivos. Las partes más altas se han visto menos afectadas en detrimento de las zonas bajas.

Aunque ha hecho frío en toda la comarca, las temperaturas más bajas se han concentrado en Jimena y San Martín del Tesorillo.

El sector tiene claro que si hubiera llovido lo suficiente se hubiera evitado el intenso frío de las últimas semanas.

Previsión

Los agricultores entienden que estas pérdidas a consecuencia de las heladas se pueden evitar en años venideros gracias a las nuevas tecnologías.

Según diversos estudios, los aerogeneradores de aire pueden ayudar a la planta a sobrevivir a bajas temperaturas con la creación de microclimas.

Por ejemplo, en Castellar hay instalados seis aerogeneradores. Sin embargo, estas torres son eficaces a temperaturas que no sean inferiores a los cuatro grados bajo cero por lo que los pasados días en los que se alcanzaron los -siete grados no surtieron efecto e incluso el pasado martes por la noche se pararon algunos aerogeneradores en Castellar ante su ineficacia.

Además, son aparatos con un elevado coste, ya que llegan a consumir 60 litros de gasoil a la hora. COAG entiende que esta técnica está abocada a su desaparición.

Sí parece que funciona como medida de prevención el riego por aspersión nocturno, una técnica que se han puesto en marcha en el Campo de Gibraltar como experiencia piloto, concretamente en la zona de Castellar. Desde Coag se ha agradecido el interés de la Delegación Provincial de Medio Ambiente que dio las instrucciones oportunas para que los operarios de la Agencia Andaluza del Agua dieran riego por la noche a los cultivos. Los operarios han trabajado hasta 14 horas seguidas para evitar más daños en el campo.

Los profesionales del sector creen que gracias al riego nocturno hay muchos árboles que se van a salvar. El sistema consiste básicamente en regar por aspersión los cultivos en horario nocturno. Debido a las bajas temperaturas el agua que cae a los árboles se congela formando una película. Así, mientras que fuera se registran temperaturas inferiores a los cinco grados bajo cero el interior del árbol no está a menos de cuatro gracias al hielo que lo recubre. El funcionamiento podría compararse al de un iglú.

Algunas ramas se parten debido al peso del hielo pero se consigue salvar al árbol que es lo importante. Se trata de un sistema laborioso pero que ha dado sus frutos.

Los agricultores del Campo de Gibraltar siguen muy preocupados, no sólo por los cultivos que ya están dañados y se han perdido, sino por la incertidumbre de si continuarán las bajas temperaturas y la falta de precipitaciones. También queda la incógnita de conocer con exactitud la cantidad de cítricos que están perjudicados y cuantos árboles sufrirán las secuelas de la ola de frío en la floración del año que viene.

Petición de ayudas
Coag ha explicado que se va a valorar la superficie afectada, así como los daños en las producciones, para que aun conociendo la difícil situación económica, se haga un esfuerzo para que los profesionales del campo puedan paliar las pérdidas de esta campaña a través de ayudas directas para replantar los cultivos afectados o indirectas tales como rebajas fiscales, reducciones de canon o tarifas de riego y exenciones impositivas.

El alcalde de Jimena de la Frontera, Guillermo Ruiz Ruiz, acompañado del presidente de Asaja-Cádiz, Manuel Vázquez Gavira, y el personal técnico de Asaja en la zona, Francisco Peco Pinto e Isabel Mª Sánchez Gallego, visitaban el pasado martes la zona para tomar conciencia de los daños infligidos por las heladas en los cultivos y aprovechaban para poner en común las iniciativas que se pueden poner en marcha a partir de ahora.

Los técnicos de ambas organizaciones agrarias insisten en que aún es pronto para saber con exactitud los daños causados, pero las visitas a pie de campo y las explicaciones de los agricultores auguran que la situación de los cultivos en la comarca no es buena. También el grupo municipal socialista de Castellar ha registrado una moción para solicitar a la Corporación que inste a la Junta de Andalucía y al Gobierno central a aprobar medidas extraordinarias para paliar los daños.

Ganadería
Las bajas temperaturas registradas en las últimas semanas también han dejado mella en el sector ganadero del Campo de Gibraltar, la zona con más cabezas de ganado de la provincia de Cádiz.

La ola de frío ha provocado un sobrecoste de 1,20 euros en el método tradicional y 1,50 en la producción ecológica, según datos ofrecidos por COAG. Este aumento de los costes se debe a la necesidad que tienen los ganaderos de invertir más en pienso y forraje para que los animales sobrevivan ante temperaturas por debajo de los cero grados.

Ángel Ruano, responsable de ganadería de COAG Cádiz, explicó que la única manera que los animales tienen de soportar el frío es comiendo más y es por ello que los ganaderos se ven obligados a comprar más pienso y forraje. Este hecho unido a la falta de pastos por la carencia de lluvias ha puesto al sector en una situación muy complicada.

Hasta ahora, debido a los escasos márgenes de beneficios, los ganaderos intentaban criar a los animales con el menos pienso posible. La filosofía era que el ganado se alimentara de los pastos libremente, una medida de ahorro con la que ha acabado la ola de frío y las heladas.

Pero este no es el único problema al que se enfrentan los ganaderos. “ Los animales luchan por sobrevivir y dejan aparcada la reproducción en condiciones de vida desfavorables”, explicó Ruano, quien añadió que las secuelas del frío perseguirán al sector el año que viene ya que habrá menos terneros.

Ruano aseguró que las temperaturas que se están registrando en el Campo de Gibraltar no son propias de la zona ni de la provincia de Cádiz por lo que las explotaciones están muy afectadas.

“Estamos viviendo una situación muy complicada en el campo. No podemos dejar morir a nuestros animales, ya que nuestro vínculo con ellos no es sólo empresarial sino también sentimental. Muchos ganaderos tenemos animales que han estado con nosotros desde hace más de diez años”, se lamentó el ganadero.

Si la situación persiste COAG se plantea solicitar a las administraciones algún tipo de ayuda para paliar la crisis que también padece el sector ganadero.


TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN