Con el nuevo itinerario los organizadores buscan que, tanto la cabecera de la manifestación como las carrozas con música, puedan partir del mismo lugar y a la misma hora. Hasta hora esto no era posible porque la marcha comenzaba en el Ayuntamiento y parte de su recorrido era peatonal. “Salir del Ayuntamieto era algo muy simbólico, pero partir del Parlamento de Andalucía también lo es”, explicó a Viva Sevilla Mar Cambrollé, presidenta de la Asociación de Transexuales de Andalucía (ATA), una de las entidades encargadas de organizar el Orgullo de Sevilla, que el año pasado reunió a más de 150.000 personas, según dato de los propios organizadores.
El Orgullo del Sur, que es como lo denominan sus organizadores, se celebró por primera vez en el año 2009, con un indiscutible éxito de participación y con una fuerte oposición por parte del Partido Popular y la asociación conservadora LGTB Colegas, que criticaron la financiación del Ayuntamiento de los conciertos que cerraron la manifestación en las dos convocatorias anteriores, el primer año Fangoria y el segundo la cantante Soraya.
Setas multicolor
El Orgullo Ciudadano, que son las actividades que se realizan durante la semana previa a la gran manifestación, dejarán de clebrarse en la Alameda de Hércules para realizarse en la Plaza Mayor del Metropol Parasol, más conocido como 'las setas' de la Encarnación. De esta forma el Orgullo se aleja de la Alameda de Hércules, una zona con mucho ambiente.
Sin financiación pública
Cambrollé también adelantó que este año el consistorio sevillano no financiará ninguna acutación, aunque “sí colaborará con los permisos pertinentes y a nivel organizativo”. De esta forma la presidenta de ATA espera “que por fin cesen las críticas” que el evento ha soportado en sus dos primeras ediciones.
El nuevo recorrido también evitará pasar por el barrio de Los Remedios, históricamente conservador. En las dos ediciones anteriores se registraron pequeños incidentes, con el lanzamiento de huevos a los manifestantes por parte de jóvenes que portaba banderas franquistas desde alguno de los balcones que daban al recorrido.