Annan fue designado ayer jueves para el cargo de enviado especial para Siria por su sucesor al frente de la ONU, Ban Ki Moon, y por el secretario general de la Liga Árabe, Nabil Elaraby.
"Es para mí un honor aceptar el cargo de enviado especial conjunto para la crisis de Siria y recibo humildemente la confianza que se ha depositado en mí", declaró Annan en un comunicado difundido por la sede de la ONU en Ginebra.
"Espero conseguir la plena cooperación de todas las partes relevantes e interesadas en apoyo de este esfuerzo unido y decidido de Naciones Unidas y la Liga Árabe para ayudar a poner fin a la violencia y a los abusos contra los Derechos Humanos y para promover una solución pacífica a la crisis siria", concluyó.