Jerez

A la espera de la nueva Carrera Oficial y de la llegada de cofradías

La Semana Santa de Jerez parece vivir un periodo de transición a la espera de la enésima modificación de la Carrera Oficial

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La Noche de Jesús

El Cristo de la Salud

Gran afluencia en horario de tarde

El Cristo

Jerez deja atrás una Semana Santa que ha tenido ciertos aires de transición, al existir la certeza de que en estos próximos meses se va a cerrar una nueva modificación de la Carrera Oficial. Salvo sorpresa mayúscula, el pleno de hermanos mayores va a prescindir del primer tramo de ese itinerario para acercar en lo posible el palquillo al monumento de las cofradías. Todo ello va a suponer una pérdida de palcos o su redistribución por lugares como la plaza del Arenal o la calle Larga, recogiendo algunas de las propuestas ya planteadas en el proyecto fallido de la alameda del Banco.

Pero a esta circunstancia debe añadirse otra no menos importante. En las vísperas del Domingo de Ramos se anunció desde el Obispado que La Sed y La Salud de San Rafael harán el próximo año su estación de penitencia a la Catedral. Ambas quieren hacerlo en la tarde del Lunes Santo, pero es el Consejo el que debe decidir. Lo probable es que se repartan entre el lunes y el martes, por aquello de que son las jornadas menos cargadas de cofradías.

Pero podría darse el caso de que alguna otra cofradía de vísperas se incorporase a la Carrera Oficial. La Mortaja, sin ir más lejos, parece en disposición de solicitarlo y lo lógico es que esa petición termine siendo aceptada si no este mismo año el próximo.

Esta Semana Santa se ha puesto de manifiesto que la presencia de jerezanos en la calle experimenta un notable descenso conforme se adentra la noche, un factor que debe tenerse en cuenta a la hora de incorporar a estas nuevas cofradías. No es descartable por tanto que los horarios deban adelantarse en estos próximos años para amoldarse a los usos y costumbres de una ciudad que -no se olvide- adopta una actitud muy similar en una Feria del Caballo que de un tiempo a esta parte brilla más bajo la luz del sol que bajo el alumbrado.

El hecho de que cuatro de las cinco cofradías de la Madrugada del Viernes Santo decidieran no salir a la calle ante la incertidumbre meteorológica reinante hace que la comparación entre el número total de nazarenos de esta Semana Santa no pueda compararse al de la pasada, donde sí procesionaron todas las hermandades. En todo caso -y corregido este factor- el número global de nazarenos es similar al del año pasado, con cofradías que suben y otras que bajan.

El nazareno sigue siendo la asignatura pendiente de la Semana Santa. Por regla general, los cortejos avanzan a un ritmo muy lento en el que parece primar el andar costalero sobre cualquier otra cuestión. La parsimonia con la que muchas cofradías pasan por Carrera Oficial llega a ser desesperante para el público y los nazarenos.

En lo patrimonial, esta Semana Santa ha dejado para la historia la inclusión del Santísimo Cristo de la Salud en el cortejo de la Hermandad de las Tres Caídas. La cofradía completa de este modo una impronta que pocos podían imaginar hace apenas unos años.

Los exornos florales y la presentación de las imágenes en la calle suelen brillar a un nivel bastante alto, algo que también ocurre con la mayoría de formaciones musicales. Eso sí, en este último aspecto se echa en falta una mayor variedad de los repertorios seleccionados por las cofradías, que por regla general abundan en la reiteración.

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