El Real Betis está teniendo muchos problemas en la zona defensiva. De hecho es el equipo que ha encajado más goles en lo que llevamos de temporada.
Al conjunto de Rubi le han marcado quince tantos en las siete jornadas que llevamos de campeonato. Esta racha tan negativa no la acumulaba el equipo verdiblanco desde el año 1990, cuando en la jornada siete también había recibido quince goles en contra.
En el plano ofensivo los béticos han ido progresando a lo largo de las jornadas, pero en el retaguardia siguen teniendo muchos problemas. Con los goles encajados el balance del Betis es de -5.
El sistema defensivo verdiblanco está siendo muy frágil y el esquema con cuatro hombres atrás está siendo muy poco fiable. La prueba de que el técnico bético no está consiguiendo dar con la tecla es el hecho de que ha probado hasta seis líneas defensivas, y ninguna ha mostrado especial solidez.
La pareja que más minutos ha disputado ha sido la formada por Mandi y Bartra aunque esta jornada vimos una modificación. Feddal volvió de lesión y tuvo minutos frente al Villarreal, aunque el contexto no le fue nada favorable. El cuarto central que queda es Sidnei, que también está teniendo problemas físicos y que ya ha comenzado a entrenar con sus compañeros.
El Betis sólo ha conseguido acabar con la portería a cero en un partido, contra el Osasuna. En el resto de partidos encajó goles y en las siete jornadas que se han jugado ha recibido dos goleadas con cinco dianas en contra, frente al Barcelona y frente al Villarreal. Entre todos los centrales, parece que ninguno está jugando a un nivel que le asegure la titularidad.
Lo mismo pasa con la pareja de mediocentros, en la que Willian Carvalho tiene más minutos que sus compañeros, pero tampoco sabemos quiénes son los titulares.
Una tarea pendiente
El Betis ya buscó reforzar el centro del campo en el pasado mercado de verano. Hasta el último día la dirección deportiva verdiblanca estuvo buscando ese perfil de mediocentro defensivo que le faltaba a la plantilla.
El bajo nivel de forma de Kaptoum y Javi García, junto con la edad de Guardado o el rol más ofensivo de Willian Carvalho dejaban una bacante en ese puesto de cinco del equipo, Finalmente no llegó ningún refuerzo y Rubi se tuvo que confirmar con los hombres que tenía a disposición.
Siete jornadas ligueras después se ha demostrado que el Betis necesitaba el mediocentro defensivo que no llegó a firmar en verano.
