Pese a que las medidas de presión contra la primera edil barreña han alcanzado ya baremos muy altos, y su propio partido a nivel regional le pide que siga sus indicaciones, lo cierto es que Ariza sigue resistiendo el pulso y mantiene su posición firme de no dimitir.
En cualquier caso, de no producirse este extremo en la reunión que tendrá lugar hoy, fuentes cercanas a la negociación señalaron ayer a este diario que el partido adoptará la expulsión como medida extrema ante la actitud que viene mostrando Ariza frente a las presiones.
Crisis
La situación, lejos de limitarse a la tensión que se está viviendo en el marco estrictamente político, con presiones desde Sevilla y con la crítica permanente de sus compañeros de partido en el Ayuntamiento, se extiende también al terreno social.
Los problemas en el Consistorio crecen, y el impago de facturas está provocando multitud de inconvenientes a los trabajadores y a los ciudadanos. El último se vivió ayer en la Jefatura de la Policía Local, donde los cortes en el suministro han afectado a la línea telefónica.
Así, los agentes policiales pueden recibir llamadas, pero no pueden realizarlas, con el consiguiente entorpecimiento a sus tareas cotidianas. El mismo problema surgió ayer también en la Delegación de Obras y Servicios.
Los cortes de luz, los apagones y cierres de dependencias municipales, la falta de gasolina y el impago de las nóminas a los trabajadores acumulan los problemas de la primera edil.
El secretario comarcal de FSP-UGT, Manuel Andrades, señaló ayer que “la situación es ya desesperante”, y lamentó que “sigue faltando la información por parte del Ayuntamiento”. Andrades espera que la reunión de hoy suponga la solución a la situación.
La secretaria comarcal de CC OO, llamó la atención ayer en Algeciras sobre el hecho de que se hayan denunciado diversas “irregularidades” en la gestión municipal que se han filtrado a los medios de comunicación, y en la que la Fiscalía “no ha intervenido”. Entre estas supuestas irregularidades, Ortega puso de manifiesto el impago de unos 20.000 euros correspondientes a cuotas sindicales.
Por su parte, Serrano dejó claro que, en su opinión, la guerra entre Ariza y su propio partido “está perjudicando la imagen del Campo de Gibraltar”.